Subordinado al bien de los destinatarios, a la calidad de los servicios eclesiales, al crecimiento de los servidores, está todo lo demás:
las estructuras en concreto.
Objeto de este quinto nivel son las acciones orientadas a la creación y funcionamiento de las estructuras de comunicación, de participación y de corresponsabilidad de todo el pueblo de Dios en la vida y misión de la Iglesia.
Este es el ámbito en el que se coordina el apoyo a la acción pastoral a través de la comunicación a todas las familias, de los medios de comunicación social, del financiamiento económico, y de los servicios técnicos.
5.1. Comisión Diocesana de Comunicaciones a las Familias
5.2. Comisión Diocesana de Pastoral de las Comunicaciones Sociales
5.3. Equipo Diocesano de Animación Pastoral (EDAP)
La Comunicaciones con todas las familias: promueve las comunicaciones personalizadas en todos los espacios y ambientes de la convivencia humana; sobre todo, se encarga de ―confeccionar, en el nivel diocesano, o de hacer que se confeccione, en el nivel parroquial la ―Carta a los Cristianos; cuidar que ésta se distribuya eficientemente, y de capacitar a las personas que se incorporan a la realización de este servicio. Es bueno distinguir que este nivel tiene su correspondencia parroquial, de manera que, lo que se dice para la diócesis, se aplica proporcionalmente a la parroquia.
Es la estructura que se encarga de promover y animar la Pastoral de la Comunicación dentro y fuera de la Iglesia que camina en México desde nuestra realidad diocesana, asesorando y apoyando a los distintos agentes, estructuras y equipos eclesiales en el campo de la Comunicación, de modo que la Iglesia se haga presente en la vida social de nuestra Diócesis, como formadora de opinión, transmitiendo la alegría del Evangelio.
Sus tareas principales son:
Es un grupo de personas de distintas vocaciones eclesiales que sirve al dinamismo comunitario de la Diócesis en su conjunto. Es coordinado por el Vicario Diocesano de Pastoral.
Corresponde al EDAP: ayudar al Obispo en la realización de su ministerio profético de llamar a la conversión al conjunto de los bautizados para que como Pueblo de Dios responda cada vez más a su vocación a la santidad; profundizar y promover la espiritualidad comunitaria; servir al Consejo Diocesano de Pastoral como equipo técnico y elaborar el plan diocesano de pastoral de acuerdo con las orientaciones que le da el mismo Consejo; capacitar y ayudar a los Equipos Parroquiales de Animación Pastoral en la realización de su tarea; preparar y organizar la Asamblea Diocesana, así como otros encuentros que le son pedidos por el Obispo.